18 de abril de 2016

LA TRISTEZA


     Sentimiento de dolor anímico producido por un suceso desfavorable que suele manifestarse con un estado de ánimo pesimista, de insatisfacción y  tendencia al llanto.




    Con este sentimiento, terminamos con todos los presentados por el Monstruo de Colores. Le envolvemos el cuerpo con lana azul y nos hacemos  también nosotros una pulsera de lana azul (la última ya ).


  Pintamos a nuestro Monstruo y leemos el cuento "Cuando estoy triste".



   Cada uno explica momentos en los cuales se siente triste. No nos gusta sentirnos así, pero entendemos que hay situaciones en las que es inevitable. Es un sentimiento muy lícito del cual no debemos huir ni rechazar. Y si tenemos ganas de llorar, debemos dejar que las lágrimas afloren.El cuerpo se manifiesta de esta manera. No debemos sentir vergüenza ni escondernos. En clase ya hemos hablado que llorar es bueno cuando uno lo necesita, y no debemos hacer caso cuando nos digan "No llores". Cambiemos esa frase que tanta tendencia tenemos los adultos a utilizar con los niños por un: "tranquilo, yo estoy contigo"; "¿quieres hablar de por qué estás triste?; "tranquilo, ya pasó"... Dependiendo de la situación. 


    Y por supuesto que los hombres también lloran. Los niños tienen el mismo derecho a llorar que las niñas. No es signo de fragilidad ni debilidad. No permitamos frases del estilo: "venga machote, que los niños no lloran". Estaremos enseñándoles a ignorar y reprimir un tipo de sentimientos importantes  y necesarios en su evolución emocional.

    Otros cuentos para trabajar la tristeza con los niños: 


  En la selva de Taimán vivía una gran familia de monos. Todos tenían un tiempo para trabajar y un tiempo para divertirse. Pero cuando llegaba el tiempo de divertirse, Mugán se quedaba sentado encima de una rama pensativo, mientras sus compañeros saltaban, jugaban o se bañaban en el río. Un cuento sobre la tristeza. 
Autora: Begoña Ibarrola. Autora de "Cuentos para educar niños felices".


    Educar en la manera de identificar y controlar las emociones (especialmente las desagradables o temibles) es algo tan importante como otros muchos aspectos del aprendizaje. En este libro, la terapeuta Cornelia Maude Spelman utiliza un lenguaje sencillo y tranquilizador para que los niños aprendan a manejar sus sentimientos y a relacionarse con los demás. Con este cuento, los niños sentirán el consuelo de reconocer sus sentimientos en los de la pequeña cobaya del cuento, que explica qué es lo que le entristece. Los pequeños lectores toman conciencia de que «todo el mundo se siente triste alguna vez», de que hay maneras de estar mejor, y de que la tristeza, finalmente, desaparece.

  Puedes leer el resto de entradas de nuestro PROYECTO EMOCIONES.


1 comentario:

  1. Muy buenas recomendaciones para trabajar el sentimiento de tristeza. Un saludo.

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